Fue un efecto dominó en toda regla: en marzo de 2015 Estados Unidos anuncia que investiga a Banca Privada de Andorra por blanqueo, Portugal interviene la entidad, Banco de España hace lo propio con Banco Madrid (propiedad de la lusa) y los clientes ven bloqueado su dinero. Entre ellos están los más de 5.000 inversores de la casa de bolsa Interdin, que tenía su cuenta con más de 22 millones de euros en Banco Madrid. Ahora, según ha podido saber Te Interesa, todos van a recuperar el montante total de su inversión (y no sólo los 100.000 euros protegidos por el Estado), tras un largo periplo que involucra a la CNMV, al administrador concursal y a asociaciones de inversores.
En un primer momento, el administrador concursal de Banco Madrid consideraba que todas las cuentas de Banco Madrid formaban parte de la masa de dinero con la que finiquitar la entidad y pagar a sus acreedores. Eso incluía la cuenta especial, llamada cuenta ómnibus, del bróker de bolsa Interdin, con más de 20 millones de euros. Interdin quebró. El grueso de los más de 5.000 clientes recuperaron sus primeros 100.000 euros, porque la CNMV ordenó al Fondo de Garantías de Inversiones que lo pagara.
Pero un grupo de 14 clientes que tenían más que esa cantidad insistieron en recuperarlo todo. Era ilógico, argumentaban, que el administrador concursal se quedara con un dinero que estaba en esa cuenta sólo a través de otra entidad. “Es como si, tras la quiebra de un párking, tú te encuentras con que el administrador concursal quiere subastar tu coche para pagar las deudas”, opina para Te Interesa Javier Flores, de la Asociación Europea de Inversores Profesionales ASINVER.
Finalmente, la empresa que lleva la administración concursal de Banco Madrid, Legal y Económico, ha cambiado de opinión y ha devuelto la mitad del dinero a Interdin, según confirman a Te Interesa tanto Legal y Económico como ASINVER.
Para el resto del dinero, los clientes tendrán que esperar a que se resuelva el concurso de Banco Madrid y se liquide toda la cantidad, puesto que se les considera lo que en la jerga se conoce como acreedores “ordinarios”.
A su vez, la administración concursal de Interdin ha realizado ya un primer pago con el 49% de su dinero por encima de los 100.000 euros.
Así, alguien que tuviera 200.000 euros invertidos habrá recuperado ya 100.000 euros de FOGAIN (una cantidad que ahora le debe Interdin al propio fondo) y 49.000 más de Interdin en este pago que concluye el litigio.
Las cuentas ómnibus como salvaguarda
Este caso es relevante porque se trata de la primera vez en España que quiebran a la vez el banco y la casa de bolsa que tiene el dinero de sus clientes en él. Ha sido, además, una prueba de fuego de las llamadas cuentas globales u ómnibus y de los bróker que las utilizan.
Cuando un inversor da parte de su dinero a una casa de bolsa, como Interdin, para que lo mueva, ésta puede no tener físicamente el dinero del cliente, sino que lo deposita en un banco en una de las cuentas conjuntas con el resto de los clientes, las ómnibus.
En estos casos los ahorros están protegidos por la Ley de Mercado de Valores, que asigna la propiedad a los clientes y no al bróker –Interdin- o al gestor de la cuenta –Banco Madrid-.
Legal y Económico disputó en un primer momento que esta cuenta fuera global y de propiedad múltiple, y por tanto protegida por la Ley. Tras la demanda de los afectados, el administrador cambió de dirección en verano de 2015, según explica la firma a este diario, y finalmente ha pagado a Interdin lo correspondiente en verano de 2016, para que ésta haga lo que considere oportuno, que ahora ha trasladado el pago a sus clientes. Una devolución indirecta.
“Aunque la resolución adoptada no es técnicamente la mejor, se resuelve el problema de fondo: el cliente recupera su dinero”, concluye Flores.