Gas Natural niega tener ningún interés en terrenos recalificados en Doñana. El incendio que asola desde hace días el entorno de Doñana afecta a una zona rica en combustibles fósiles. Una región en la que Gas Natural ya cuenta con varios pozos de extracción de gas y en la que prepara un proyecto, el proyecto Marismas, que está en fase de tramitación para construir un gaseoducto y un almacén.
El exdirigente de Izquierda Unida Cayo Lara abrió el debate en Twitter relacionando el incendio en Doñana con el cambio de la Ley de Montes en 2015 aprobado por el PP. Según esta nueva ley, las zonas forestales arrasadas por el fuego podrían ser recalificadas si concurren «razones imperiosas de interés general».
Fuentes de Gas Natural han asegurado a Teinteresa.es que la empresa no tiene ningún interés en la recalificación de estos terrenos ya que no afectaría al proyecto, que ya está en marcha y cuenta con todos los informes de impacto ambiental ya elaborados. De hecho, el proyecto ha sido dividido en cuatro partes, de las cuales dos ya cuentan con la autorización medioambiental de la Junta de Andalucía. Una de ellas funciona como almacén desde 2012.
¿Pueden recalificarse las zonas incendiadas?
El polémico proyecto Marismas ha sido declarado de utilidad pública y algunas asociaciones medioambientales como Greenpeace aseguran que «amenaza la supervivencia de Doñana», un espacio natural protegido. Sin embargo, desde la empresa aseguran que esos pozos están fuera del entorno protegido y que llevan ahí «desde la década de los 80» y no supondría una «nueva construcción, sino una actualización de las infraestructuras que ya existen».
En el tuit que desató la polémica, Cayo Lara insinuaba que el incendio en la región podría estar relacionado con el proyecto Marismas. «¿Coincidencias?», se preguntaba. Poco después el resto de tuiteros continuó, añadiendo tuits en los que se relacionaban el incendio, las posbles recalificaciones y la «ayuda» de Felipe González, como consejero de Gas Natural, a la hora de conseguir las licencias. Algunos de los mensajes llegan a los 3.00 retuits y han revolucionado las redes.
El incendio de Doñana está ocurriendo donde Gas Natural quiere un nuevo gaseoducto. Felipe González ayudó con licencias. pic.twitter.com/p3XK3UvHv3
— Bari Dz. (@Bari_Dz) 25 de junio de 2017
Desde Gas Natural aseguran a Teinteresa.es que el proyecto del gaseoducto no tiene ninguna relación con la Ley de Montes que fue aprobada en 2015, mientras que la actividad en la zona «lleva tramitándose desde 2006».
Además, la Junta de Andalucía, que sería una de las entidades que deben aprobar los permisos, se ha apresurado a asegurar que «no se recalificará ni un metro cuadrado» de la zona quemada en el entorno de Doñana.
En funcionamiento desde 2012
Estas fuentes explican que el proceso de «actualización» de los pozos se ha dividido en cuatro subproyectos que tienen diferentes grados de desarrollo.
Estas cuatro partes son Marismas Occidental, Aznalcázar, Marismas Oriental y Saladillo. De ellas, solo las dos últimas se encuentran dentro del Espacio Natural Doñana. Ambas, explica la empresa, cuentan con la resolución ambiental favorable del Ministerio de Medio Ambiente. Sin embargo, en 2016 la Junta de Andalucía denegó la autorizaqción para continuar con las infraestructuras en el interior de la zona protegida.
Los otros dos subproyectos, sin embargo, que están en «el entorno y los límites» de Doñana sí que cuentan con la autorización de la Junta. La parte de Occidental funciona «como almacenamiento» desde hace cinco años. Además, aseguran que el incendio no supone ningún peligro para los pozos de extracción de gas que ya existen en la zona.
«Amenaza Doñana»
Pese a la autorización pública, asociaciones como Greenpeace han intentado paralizar el proyecto. «Doñana es una de las joyas de nuestro país, protegida desde 1969 u declarada Patrimonio de la Humanidad», explican desde la asociación, que ha recogido más de 100.000 multas para vetar el gaseoducto.
«El proyecto de Gas Natural pone en riesgo la biodiversidad y el futuro de este espacio», aseguran. Otros proyectos como el de la Plataforma Castor, dicen, creada para almacenar gas «produjeron más de 500 terremotos y una indemnización con dinero público a la compañía de casi 1.400 millones».
que no existe «ningún riesgo» de que el fuego afecte a sus infraestructuras ni a la viabilidad de los proyectos que siguen en marcha en la zona.